Juan Espadas critica otro presupuesto “nefasto” de Moreno Bonilla que “no se corresponde con la realidad” de Andalucía

El secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, ha criticado un nuevo presupuesto de Moreno Bonilla “nefasto”, impuesto por la mayoría absoluta del PP y que “no se corresponde con la realidad”, sin espacio a la negociación y a las aportaciones de la oposición en beneficio a la ciudadanía y sin garantía alguna de ejecución.

Tras el debate final en el Pleno del Parlamento, Juan Espadas ha lamentado que las cuentas públicas de la Junta para 2024 sean aprobadas “en exclusiva con el apoyo del PP”, en un nuevo ejercicio de mayoría absoluta como un rodillo por el que Moreno Bonilla impone sus presupuestos como “lentejas o las tomas o las dejas” y “sin interés en lo que está sucediendo en Andalucía”.


Ha advertido de que el nuevo presupuesto del PP para Andalucía crece única y exclusivamente por el incremento de las transferencias del Gobierno de España y ha puesto en duda de que Moreno Bonilla y su Ejecutivo vayan a cumplir lo que han aprobado.

El también presidente del Grupo Socialista incide en que Moreno Bonilla y su Gobierno “no hacen propósito de enmienda” en sus nuevos presupuestos y no resuelven su “mala gestión” para evitar que Andalucía siga “en el vagón de cola en todos y cada uno de los indicadores” económicos y sociales del país.

Ha remarcado que la comunidad “no va a llegar al 50% de ejecución de las inversiones” del presupuesto del PP para 2023 ni tampoco va a completar el gasto de fondos europeos, como subraya la Cámara de Cuentas de Andalucía, es “un desastre y habrá que devolver dinero a Bruselas, como venimos advirtiendo” desde el PSOE-A.

Para Espadas, la “mala gestión económica” de Moreno Bonilla demuestra que sus nuevos presupuestos en la Junta van a ser “propósitos que no se corresponden con la realidad”.

“Andalucía tiene presupuesto en 2024, pero no el que necesita”, ha resumido el líder socialista andaluz, y ha criticado que estas cuentas públicas no contemplan más recursos para lo importante, para la sanidad pública “y no para la privada”, para combatir las lista de espera en dependencia y para mejorar la calidad de la educación pública. “Es un presupuesto de la continuidad en el error y que no se ejecuta en su totalidad”, ha concluido.