El PSOE-A denuncia la “desidia” de Moreno Bonilla frente a la sequía y le exige que “se ponga las pilas”y se “anticipe” a los problemas

El coordinador de la Presidencia del Grupo Parlamentario Socialista, Rafael  Márquez, ha instado al presidente de la Junta de Andalucía a explicar qué está pasando verdaderamente con la obras hidráulicas pendientes de  ejecución desde 2020 y qué está pasando realmente con su política de  agua de cara a afrontar la sequía.  

Tras denunciar la “desidia e incompetencia” en que está instalado el  gobierno andaluz, Márquez ha subrayado que “lo que le pedimos a Moreno  Bonilla es que se ponga las pilas, que se ponga a trabajar, que piense en los andaluces y andaluzas, que se anticipe a los problemas y que deje la  confrontación partidista a otro lado y piense en los ciudadanos de  Andalucía”. 

Márquez ha criticado que frente a la problemática situación que  atraviesan muchos municipios de todo el ámbito regional, de las 16 obras  hidráulicas comprometidas por el Gobierno andaluz del PP en 2020  “apenas ha finalizado una sola y la mitad no están ni siquiera iniciadas”. 

“Desgraciadamente, hoy falta un día menos para la próxima sequía, y  lamentablemente, el Gobierno de la Junta de Andalucía, ante esta certeza,  en vez de ponerse las pilas, ocuparse de uno de los principales problemas  y retos que encaramos los andaluces, está situado en la desidia, en la  dejadez y en la auténtica incompetencia”, ha insistido. 

Márquez ha asegurado que para Moreno Bonilla, la sequía no es un  problema que le competa, a pesar de que las competencias en materia  de aguas le corresponde a la Junta, sino que la sequía, “la política de  aguas se ha convertido en una herramienta de marketing de cara a su  estrategia de confrontación con los ayuntamientos y en especial con el  Gobierno de España”. “Moreno Bonilla lleva más de seis años gobernando la Junta de Andalucía,  ya es el segundo presidente más antiguo, sólo después de Manuel Chaves,  en la Presidencia, por lo que la herencia recibida, es precisamente la  herencia de su gestión, de la gestión de estos últimos seis años”, ha  indicado. 

Y, en este sentido, ha subrayado que “la herencia de Moreno Bonilla que  ahora los andaluces estamos padeciendo es la de 1.200 millones de euros  en materia de aguas sin ejecutar desde que es presidente de la Junta de  Andalucía”. 

“1.200 millones de euros sin ejecutar en políticas de agua a pesar de estar  padeciendo una situación dramática en muchos pueblos y ciudades de  Andalucía, a pesar de que muchos sectores estratégicos están pendientes  de un hilo por esta situación, a pesar de su política de marketing continuo  con la legislatura del agua, con la revolución verde, con el plan sequía plus.  Mucho marketing y poca gestión”, ha asegurado el diputado socialista. 

“Fíjense si el gobierno de Moreno Bonilla está de brazos caídos, que a 30 de  junio de 2024 no ha ejecutado ni la quinta parte de los fondos que tienen  para este año en materia hidráulica”, ha subrayado Márquez, quien ha  destacado que mientras el Gobierno de España ha incrementado a lo  largo de 2024 un 24% su aportación en fondos para el agua, la Junta de Andalucía sólo ha ejecutado un 3,49% de los recursos que el Gobierno de  España le ha transferido”. Esto, a su juicio, pone de manifiesto que “el  verdadero problema que tiene Andalucía no es un problema de  financiación, sino de ejecución de esos recursos por parte del gobierno del  PP”

Los andaluces merecemos un gobierno andaluz “a la altura de las  circunstancias” 

“Los andaluces necesitamos una financiación justa que nos garantice una  adecuada prestación de nuestros servicios públicos, y los socialistas  vamos a garantizar esa financiación justa para nuestra tierra”, ha  asegurado Márquez, quien ha reivindicado que “los andaluces también,  nos merecemos un gobierno andaluz que esté a la altura de las  circunstancias y que sea capaz de priorizar la gestión, por encima de la  confrontación”. 

“Nos merecemos un gobierno andaluz que esté en las cosas importantes,  que esté en la gestión de los asuntos que preocupan a los ciudadanos, en  los temas que afecta al día a día de los andaluces, y desgraciadamente,  Moreno Bonilla está instalado en la confrontación permanente, en la  confrontación estéril, mientras que los problemas de la sanidad, de  nuestra educación, del sistema de dependencia y de la vivienda se convierten en las señas de identidad de un gobierno sin rumbo, de un  gobierno que no sabe dónde va, y que su única tabla de salvación es la  confrontación con el Gobierno de España”, ha añadido Márquez. 

Ante esta situación, y ante la cierta posibilidad si no llueve este otoño y que  volvamos a una situación de emergencia por la sequía, el coordinador de  la Presidencia del Grupo Parlamentario Socialista ha reclamado al  gobierno andaluz que “ejecute una serie de medidas inaplazables y que  ya van tarde”. 

La primera, “que ejecute de una vez por todas, y finalice, las obras que se  declararon de emergencia en el 2020”. La segunda, que ponga en marcha,  “a la mayor brevedad posible, un plan de choque de obras de emergencia,  de obras de microcirugía hidráulica en todas las provincias de Andalucía  sin excepción”, con cargo al canon del agua que se cobra a todos los  andaluces, para que se eliminen los puntos negros de abastecimiento. 

La tercera, que garantice una coordinación y cooperación con los  municipios, que son los entes que tienen las competencias en materia de  abastecimientos. 

“En los peores momentos de la sequía, el ministerio mantuvo reuniones  semanales con la Junta de Andalucía para anticiparse a los problemas y coordinar una agenda de actuaciones y de obras, ¿por qué no hizo lo  mismo la Junta con los ayuntamientos? ¿por qué no se conforman  comisiones técnicas entre las delegaciones provinciales y las  diputaciones para anticiparse y coordinar esa gestión? Es fundamental, 

porque si no llueve vamos a sufrir una grave crisis como consecuencia de  la sequía”, ha indicado Márquez. 

Y en cuarto lugar, un plan de contingencias, “que nos permita tener un plan  preparado en caso de que fuera necesario para minimizar los efectos de  la sequía para nuestros principales sectores económicos que pudieran  verse afectados”.